Especialistas urgen regulaciones claras para impulsar la economía circular en México

10/10/20252 min read

Consolidar un marco regulatorio moderno y gestionar el agua como un recurso estratégico son los dos grandes desafíos que determinarán el avance de la economía circular en México, según coincidieron este jueves representantes empresariales durante el encuentro México por el Clima.

En el evento, que se celebra del 8 al 10 de octubre en el Papalote Museo del Niño de la capital mexicana, los especialistas advirtieron que la transición hacia modelos productivos sostenibles requiere de certidumbre normativa, incentivos claros y colaboración entre sectores.

Los expertos señalaron que persiste un vacío en políticas que premien la innovación y la inversión verde, pese a que se ha avanzado en temas de reciclaje, reúso y reducción de residuos.

El director ejecutivo del Centro de Estudios del Sector Privado para el Desarrollo Sostenible (CESPEDES-CCE), José Ramón Ardavín Ituarte, apuntó que la regulación debe impulsar la corresponsabilidad sin imponer criterios que frenen la competitividad.

“El papel de la autoridad no es decirnos cómo hacerlo, sino fijar metas ambiciosas y permitir que la industria proponga las soluciones”, afirmó.

Actualmente, México cuenta desde 2021 con una Ley General de Economía Circular, que establece principios de diseño sustentable, valorización de residuos y responsabilidad compartida, aunque algunas de sus disposiciones reglamentarias federales aún enfrentan desafíos de implementación.

A nivel local, la Ciudad de México aprobó en 2023 su propia ley, la cual prevé que las empresas adopten esquemas de recuperación de materiales y criterios de circularidad conforme al reglamento y herramientas de evaluación que ese ordenamiento desarrolle.

La directora de Asuntos Corporativos de Tetra Pak, Zerene Kahan Oblatt, consideró que la definición de reglas uniformes permitiría acelerar la consolidación de cadenas de reciclaje.

“En México hemos creado una red de recicladores que garantizan una segunda vida para nuestros envases, pero necesitamos una regulación que reconozca y estimule este tipo de inversión”, señaló.

Desde el sector acerero, Mónica Barrera Vera, de la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero de México (Canacero), aseguró que la circularidad ya es una práctica cotidiana, pues cerca del 60 % del acero producido en el país proviene de chatarra, frente a un promedio mundial de 30 %.

Sin embargo, pidió que las normas contemplen incentivos fiscales o esquemas de certificación que reconozcan a las industrias que logran avances medibles en reducción de emisiones y uso de materiales reciclados.

Asimismo, destacó que el reciclaje de acero evita la emisión de 1.5 toneladas de dióxido de carbono por cada tonelada reprocesada.

El agua, segundo pilar de la economía circular

Los ponentes coincidieron en que el uso y tratamiento del agua es un eje clave de la economía circular. En México, el sector industrial consume cerca del 14 % del total del agua disponible, pero menos del 10 % de las aguas residuales tratadas se reutilizan, según datos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

Para Claudia de la Vega Martínez, vicepresidenta de Asuntos Corporativos de Heineken México, la sostenibilidad hídrica debe considerarse parte del marco regulatorio y no una política paralela.

Por su parte, Barrera señaló que la industria siderúrgica ha aumentado a 18 % el uso de agua tratada en sus procesos y que los próximos pasos dependen de homologar estándares de calidad y concesiones claras.

“El reúso del agua no debe penalizarse, sino integrarse a un sistema que reconozca su valor”, advirtió.